La artrosis es una enfermedad que produce dolor, deformidad y limitación de los movimientos. La enfermedad aparece cuando el cartílago articular, que es el tejido que rodea el extremo del hueso en las articulaciones, comienza a desgastarse. Ese cartílago tiene la función de proteger y amortiguar los impactos entre los extremos de los huesos,permitiendo el movimiento de la articulación.
Este tejido, con el avance de la edad, se deshidrata, se desgasta y puede hasta desaparecer, dejando el hueso al descubierto, de manera que al rozar entre sí, se erosiona.
El hueso intenta reparar el daño formando hueso nuevo que no tiene las características ni la distribución del hueso original. Se forman entonces los “picos de loro” u osteofitos marginales.
Cualquier articulación puede resultar afectada, siendo las más frecuentes las de la columna, la cadera y la rodilla.
La artrosis de la cadera es una de las enfermedades más frecuentes en la población mayor, pero un gran número de casos proviene de alguna enfermedad desarrollada en la infancia.
La artrosis de la cadera es una de las enfermedades más frecuentes en la población mayor, pero un gran número de casos proviene de alguna enfermedad desarrollada en la infancia.
En ese sentido, sostenemos, que hay dos tipos de artrosis. Una se denomina “primaria”, se debe al desgaste y envejecimiento articular y se presenta a partir de los 50 ó 60 años. La otra es la “secundaria” que se desarrolla a partir de un sufrimiento articular durante la niñez.
Éste es el tipo de artrosis que predomina entre los adultos, ya que un 60 a 70 por ciento de reemplazos articulares, se deben a alguna afección previa.
Es que no se ha descubierto una cura totalmente efectiva y que supere al reemplazo total de la articulación. La solución ideal sería el reemplazo del cartílago hialino, aunque en realidad no se ha podido desarrollar esta técnica.
En el caso de poner una prótesis de cadera, la vida útil de la misma es de 15 años, aproximadamente; por lo tanto, si la operación se realiza a los 50 años, a los 65 debería someterse nuevamente a otra intervención.
Entre las enfermedades que provocan artrosis de cadera encontramos la displasia del desarrollo o luxación congénita de cadera, afección que se presenta en el recién nacido y el diagnóstico debe hacerse en forma temprana.
En la actualidad la prevención se hace mediante una ecografía de cadera dentro de los 3 primeros meses de la vida. Es cinco veces más frecuente en las mujeres que entre los varones y ocurren uno a dos casos, cada mil niños vivos.
El inicio temprano del tratamiento, colocando un arnés, evita complicaciones y la aparición de artrosis precoz. Pero también los padres y pediatras deben prestar atención cuando el niño tiene dolor en la zona o renguera.
La enfermedad de Perthes, necrosis temporaria de la cabeza femoral del niño, es otra de las causas originarias de la afección que nos ocupa. Un diagnóstico temprano, con una descarga articular adecuada y un tratamiento correcto, impediría el deterioro articular progresivo.
La epifisiolisis de la cadera es otra de las enfermedades que pueden desarrollar artrosis. Se trata de un deslizamiento de la cabeza femoral del niño o adolescente que se soluciona con la fijación quirúrgica oportuna.
Las infecciones osteoarticulares, los procesos inflamatorios debidos a otras enfermedades de base, los traumatismos o los tumores óseos, en los niños, pueden manifestarse como una simple renguera y detectados oportunamente pueden evitar o postergar el desarrollo de una artrosis secundaria en el futuro.
Una consulta anual con el especialista, muchas veces descarta un problema y pone en evidencia cómo la Ortopedia y Traumatología Pediátrica se han transformado en las especialidades infantiles con más volumen de consultas, detrás de la Clínica Pediátrica.